I Tortuga de Tierra | Prosa poética
Por:Alma Guardado
Esto es el primer capítulo del proyecto de libro: La niña que no tenía lugar o sobre cómo ser una isla, escrito por Alma Guardado. Publicaremos las siguientes partes próximamente...

Tengo
Tengo un nido de letras enmarañado en el pecho, muchas veces al día las palabras se amontonan en la punta de mis dedos… ¡gritan! Pero esta maldita costumbre de apretar los puños no permite que sean. Las ganas se me vuelven cansancio, amargo y amarillo. Llevo los “no” de todos los días de mi infancia sembrados en el cuerpo.

Dibujo mapas, construyo brújulas, limpio caminos, miro cien cielos al día como buscando señales. Dejo sobre el agua barcos blancos de papel que no van a ningún lado, pero llenan mis tardes de pequeños viajes.

Tengo un embarazo de cuarenta años y a pesar de los dolores diarios aún no consigo, del todo, parirme a mí misma.
Quiero
Escribir sobre los dirigibles que se extravían en días de tormenta,
sobre los paraguas que tienen envidia de los bastones,
sobre los navíos que se esconden detrás de las olas,
sobre los amoríos de las luciérnagas,

sobre las nubes y sus conversaciones con los tinacos
que habitan en las azoteas,
sobre los sueños de brujas que huelen a manzana verde,
sobre las pesadillas que se esconden debajo de la cama.
Quiero escribirlo todo en amarillo, en verde o en morado.
Quiero escribirlo despacito o así como un disparo.
Con buena o mala letra.
Quiero escribir que en mis ojos también sube la marea
que la respiración es ritmo, es canción, es poema
que los autobuses se reúnen a contar historias de viajeros
en noches de luna llena.

Quiero escribir sobre todo lo que puede ser traducido a letras.
Quiero escribir la lista del súper
y ver que la vida se transforma en anécdota.
Quiero escribir sobre tus ojos,
Sobre los míos,
Sobre papel,
O al ras del suelo.
Quiero escribir sobre el amor

y su antagonista el odio
a quien tanto ama
Quiero escribir sobre arte y filosofía
sobre el tarot y la política.
Quiero escribirlo todo
Quiero…
Monocromía
El mundo está habitado por colores malcriados que acostumbran a gritar historias a la gente que pasa. Uno, no puede descubrir el mundo en medio de tanto ruido:
La casa, antes de ser casa es azul o amarilla;
la niña, antes de ser niña es rubia o cobriza.
Lo bueno, lo malo,
la materia que se crea y se recrea
el afuera, el adentro

de nuestros sueños y deseos,
todo está permeado por la colorimetría.
Anegado de mundo, el mar se transforma en espacio aéreo.
Blanco sobre blanco, vacío transformado en cuerpo,
lugar de lo no dicho, de lo invisible, de lo no pensado. Sólo…
blanco, blanco infinito, blanco posibilidad.
Blanco…
vacío donde todo puede
ser
soñado, imaginado, creado, trazado, ronroneado.
Dedos, una mano, un pincel, un tono solo:
Negro.
Sueños sin medida.

#prosapoética #poesía #pensamientos #escritura